Taraxacum

Nombre científico: Taraxacum officinale

Familia: Compositae

Origen: Europa mediterránea

Otros nombres

España: Diente de león

Cataluña: Pixallits

Euskadi: Aintañilili

Portugal: Dente de läo

UK : Rubber dandelion

Francia: Pissenlit

Italia: Tarassaco

Herbácea perenne de raíz pivotante y hojas que aparentan ser basales pero en realidad parten de un tallo muy corto.

Se la encuentra en praderas, bosques, costados de los caminos y terrenos sin labranza.

Hojas arrosetadas runcinadas a oblongas de largo promedio entre 12 y 15 cms, en color verde medio. Llegan a ser tan sectadas en triángulos incurvados que recuerdan los dientes de un león.

Las flores amarillo oro en capítulos solitarios en el ápice de largos tallos huecos y sin hojas, algo rojizos que alcanzan entre 15 y 30 cms de altura; al cortarlos segregan látex.

Fruto en aquenio con terminación filiforme sedosa que forman una esfera y se desprenden con la brisa transportando así las semillas.

Florece en cualquier época del año, pero su mayor empuje es en primavera.

Es en esta época (primavera) cuando se la recolecta, dejándola secar a la sombra ventilada y almacenando luego en lugar fresco y oscuro para disponer de ella el resto del año.

Considerada por muchos jardineros como una mala hierba, es sin embargo muy útil como hierba medicinal así como también de buenos valores para la alimentación.

Principales componentes

- aceite escencial

- sales minerales

- clorofila

- inulina

- provitamina A

- vitaminas B y C

- niacina

- inosita

- esparagina

- tirosinaga

- potasio

- hierro

- levulina

La inulina y la levulina que se encuentran principalmente en la raíz ayudan a balancear el nivel de azúcar en sangre; por lo tanto es adecuado en tratamientos contra la diabetes.

La inulina es también un importante inhibidor del proceso de la psoriasis.

El diente de león tiene un suave efecto laxante y diurético, en consecuencia es depurativo.

Ayuda en la limpieza de la sangre, lo que lo hace adecuado en tratamientos de insuficiencia renal, gota y artrosis.

Es colerético, ayudando en la digestión de las grasas al facilitar la producción de bilis por el hígado.

Se aconseja en el tratamiento de hepatitis, cirrosis, vesícula lenta e insuficiencia hepática.

Mejora la digestión favoreciendo la secreción de ácido hidroclórico por las glándulas estomacales, por lo que se usa como tónico estomacal.

Por contener un principio amargo, la taraxina, es adecuado como aperitivo.

El látex que contienen los tallos florales se usa en forma tópica para eliminar verrugas y quitar manchas de la piel.

Contraindicaciones: en casos de cálculos de vesícula, diarreas, úlcera estomacal y colon irritable.

Los tratamientos con hierbas naturales deben hacerse siempre bajo la supervisión de un profesional competente en la materia.

Usos culinarios

Sus hojas tiernas de principios de primavera tienen múltiples usos culinarios, entre ellos las ensaladas crudas, bocadillos con las hojas hervidas, tartas, etc.

Por la presencia de vitaminas, niacina y hierro se aconseja en casos de anemia.

Con dos horas de remojo previas a su uso, se le quitará lo amargo.

Los pimpollos se maceran en vinagre durante por lo menos un mes, siendo luego muy apetecibles como guarnición de aves y pescados.

Las raíces se lavan y se dejan secar al sol o en horno a una temperatura no mayor de 50ºC, se trocean y se tuestan; se muelen y se usan como sustituto del café.

Aromaterapia

La escencia de diente de león es apropiada en casos de stress por trabajo excesivo; da relajación física, emocional y mental.

Favorece la meditación, la introspección, el sincerarnos con nosotros mismos y nos ayuda a discriminar las verdaderas emociones del emocionalismo.

Es relajante muscular y libera las toxinas del músculo.